sábado, 20 de septiembre de 2014


sentirme menos frágil si te tengo cerca, 

sentirme invencible si me besas. 



September

Pasar de levantarte a la hora de comer a despertarte tan temprano que siga siendo de noche... 
Pasar de dormirte a las tantas de la madrugada a empezar a bostezar del sueño a las nueve de la noche... 
Pasar de salir todos los días de casa sin más preocupación que "¿habré cogido las llaves?" a estar tan ocupado que no puedas ni ver a tus amigos a diario... 
Cambiar los biquinis por jerseys... 
Cambiar las tardes de películas y series por tardes de estudio y deberes...  
Septiembre. 

Ese mes tan odiado por tantos... Pero no por mí. Es cierto que septiembre nos devuelve la rutina, pero también nos da la oportunidad de comenzar un nuevo estilo de vida, de cambiar todo lo que no nos ha traído más que problemas esa anterior etapa y convertir esos errores en lecciones que no debes volver a llevar a cabo, de exprimir más aún aquellos buenos hábitos que hemos ido almacenando año tras año hasta llevarlos al límite y de revivir esos magníficos momentos que recuerdas con nostalgia y olvidar todos los que te hicieron sufrir. Septiembre es el inicio de algo nuevo, nuevas experiencias, nuevas ilusiones, nuevos acompañantes en este viaje al que llamamos vida, nuevos engaños, nuevos enfados, nuevas reconciliaciones, nuevos amores. Para mí el año no empieza en enero, empieza en septiembre, y eso me gusta. No solo es bonito el verano, el otoño y el invierno también tienen su encanto.